Las siguientes son
las conclusiones de una investigación sobre estrés docente, llevada a cabo en
España, y publicadas en una revista científica sobre Salud ¿Cuáles son las
evidencias más importantes encontradas? ¿Existen diferencias de género en las
consecuencias del mal? ¿En qué ámbito el riesgo es mayor?
Los resultados encontrados en este trabajo muestran que es
el profesorado de enseñanza secundaria el que experimenta mayor estrés laboral,
informando de más cambios negativos e incontrolables en la presión laboral.
Además, en este colectivo, los sucesos estresantes más frecuentes relacionados
con el área laboral son los cambios experimentados durante los dos años
anteriores, con medias que duplican o incluso, en algunos casos, triplican a
las del estrés derivado de las relaciones con los compañeros o superiores.
Por el contrario, en el profesorado de primaria las medias
de los tres tipos de eventos son más similares, siendo los cambios en las
cargas laborales los que son percibidos como más negativos e incontrolables. Y
también es el profesorado de secundaria el que está más insatisfecho con su rol
como docente. Todo ello parece ser independiente del género. Por el contrario,
hemos encontrado que algunas conductas que se relacionan con la salud, como el
ejercicio físico o el consumo de bebidas alcohólicas, difieren en función del
tipo de enseñanza en el caso de los hombres, pero no en el de las mujeres.
Quizá estas diferencias conductuales en los profesores de secundaria puedan
interpretarse como una forma de afrontar el mayor estrés a que están sometidos,
ya que se ha encontrado que el consumo de alcohol está asociado con el estrés
en algunos hombres, pero no en las mujeres.
En cuanto a las causas de este mayor estrés e insatisfacción
con el rol laboral en el profesorado de secundaria, quizá influyan los cambios
de la reforma educativa de la aplicación de la LOGSE, que han conllevado que el
alumnado adolescente (que suele resultar particularmente conflictivo para el
profesorado) que antes estaba en educación primaria ahora esté en secundaria.
En todo caso, las diferencias en estrés y satisfacción con el rol laboral en
función del tipo de enseñanza señalan la relevancia de los factores
estructurales y organizacionales en el estrés laboral, tal y como sucede en
otros estudios.
Pero, pese a que este mayor estrés laboral no se traduce en
diferencias significativas en salud en función del tipo de enseñanza, tanto la
insatisfacción con el rol laboral como algunas medidas de estrés laboral se
asocian con sintomatología física y mental, aunque en ningún caso la varianza
explicada alcanza el 10%. Así, se ha observado que el profesorado con mayor
insatisfacción con el rol laboral tiende a tener más sintomatología somática y
síntomas de ansiedad y depresión, y a estar más insatisfecho en general con su
forma de hacer las cosas y a disfrutar menos de las actividades diarias.
Hemos encontrado que el profesorado que ha experimentado más
cambios negativos e incontrolables en la presión laboral durante los dos años
anteriores tiene más sintomatología somática, depresiva y de ansiedad e
insomnio. Además, los que mantienen relaciones con los compañeros o con los
superiores valoradas como negativas e incontrolables informan de más ansiedad.
Los cambios en las cargas laborales parecen ser independientes de la salud,
aunque se da una ligera asociación entre los percibidos como incontrolables y
los antecedentes de enfermedades importantes. También la sintomatología de tipo
alérgico, los resfriados y el número de enfermedades actuales parece ser
independiente del estrés laboral. Estos resultados parecen bastante coherentes
con los típicos de las investigaciones entre estrés y salud, pues aunque se ha
encontrado de forma consistente que están relacionados, los coeficientes suelen
ser bajos. Porque, como señala Lazarus, la salud está influida por un gran
número de factores sobre los que tenemos escaso control, entre los que se
incluyen las características genético-constitutivas, los accidentes, las toxinas
ambientales y los estilos de vida a largo plazo, lo que puede hacer que sea
poca la varianza restante para ver la influencia de los factores psicosociales
como el estrés. Además, hay que tener en cuenta que el estrés experimentado por
una persona puede ser generado por muchas más interacciones y experiencias que
las del área laboral, y que son múltiples los factores personales y sociales
implicados en el proceso del estrés y en su impacto en la salud.
También hemos encontrado que el apoyo social ante conflictos
laborales es relevante para la salud, con menor sintomatología, tanto física
como psicológica, en las personas con mayor apoyo social. El papel protector de
la salud del apoyo social es un hecho constatado en múltiples investigaciones.
Existe evidencia de su relevancia en el estrés laboral del profesorado.
Las diferencias de género en el profesorado parecen ser
bastante escasas, habiendo encontrado únicamente diferencias significativas
entre mujeres y hombres en cuatro de los factores. Concretamente, hemos
encontrado que las mujeres tienen más motivación de logro y presión por el
tiempo y más sintomatología de tipo somático, evaluada a través del GHQ-28, que
los hombres. Y estos tienen más síntomas alérgicos e inhibición emocional que
las mujeres. Resulta destacable la ausencia de diferencias entre mujeres y
hombres en algunos factores, sobre todo en los de sintomatología depresiva y de
ansiedad, ya que son varios los estudios que muestran mayores niveles en las mujeres.
Quizá esta ausencia de diferencias sea debida a que mujeres
y hombres tienen el mismo rol laboral, lo que conlleva una cierta igualdad de
formación, salario y condiciones laborales. En este sentido, nuestros trabajos
coinciden con los de otros autores que encuentran que la relación entre las
experiencias laborales y el malestar psíquico es igual para mujeres y hombres.
Finalmente, queremos destacar que aunque los resultados son
bastante concluyentes al indicar la mayor situación de riesgo de estrés laboral
del profesorado de enseñanza secundaria, el presente estudio tiene una serie de
limitaciones: la muestra no es aleatoria, lo que limita la generalización de
los resultados; el estudio es transversal, por lo que sólo se puede hablar de
asociación, no de causa-efecto; y aunque el profesorado de secundaria muestra
más estrés laboral e insatisfacción con el rol laboral no tiene peor salud que
el de primaria, lo que indica la necesidad de seguir profundizando en el
proceso de estrés-enfermedad.
Extraído de
María Pilar Matud Aznar / María de Abona García Rodríguez /
María José Matud AznarESTRÉS LABORAL Y SALUD EN EL PROFESORADO: UN ANÁLISIS DIFERENCIAL
EN FUNCIÓN DEL GÉNERO Y DEL TIPO DE ENSEÑANZA
International Journal of Clinical and Health Psychology, febrero-marzo, año/vol. 2,
número 003
Asociación Española de Psicología Conductual (AEPC)
Granada, España
pp. 451-465
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