Tips y ayuda psicológica de la vida
real para combatir la ansiedad.
La ansiedad es cada vez más común
entre diversos sectores de la sociedad en México y numerosos países del mundo y
aunque frecuentemente se oye que no tiene cura, sí existen tratamientos
efectivos para combatir la ansiedad. Actualmente ha sido abordada
incluso en películas, de las que podemos obtener información útil para su
tratamiento:
Dentro de la historia de la película “Iron
Man 3” de Marvel que se exhibió en la Ciudad de México, el personaje
principal, Tony Stark, sufre ataques de ansiedad cuando no tiene cerca su
armadura, dejando ver que en cierto grado, depende de algo externo a el para
sentirse seguro.
Cuando no puede tener su armadura en
momentos que la necesita, vemos que empieza a tener algunos síntomas comúnmente
asociados con la ansiedad, como ataques de pánico, taquicardia y palpitaciones,
mareo, visión borrosa, insomnio, sobresaltos nocturnos, pesadillas, y varios
más.
Quienes no somos superhéroes también
nos creamos nuestras propias armaduras o protecciones, que pueden ser fármacos, hábitos repetitivos,
fantasías y conductas diversas que, aunque nos ayudan a sentirnos tranquilos
por momentos, frecuentemente son también una manera de seguir encubriendo las
causas profundas de nuestros problemas.
Síntomas de ansiedad en hombres y
mujeres
Es importante que las personas que
sufren ataques de ansiedad recuerden que esta no va a desaparecer de la noche a
la mañana, ni por arte de magia, pues si hoy la sienten con más o menos fuerza,
es porque se ha ido formando a lo largo de los años, a través de problemas y
situaciones no resueltas en tu vida.
Cuando estas situaciones ya han
pasado, pero no han sido resueltas, pueden sentir algunos síntomas, además de
los que describí arriba. Entre los principales síntomas de la ansiedad también
se encuentran estos:
- fantasías catastróficas (contigo o con seres
queridos);
- dolor muscular y tensión nerviosa (cuello,
espalda);
- sentir adormecimiento en brazos y piernas;
- sudoración excesiva en manos o pisé;
- sensación de falta de aire;
- miedo a volverte loco o miedo a poder morir;
- miedo al futuro;
- miedo a los espacios donde hay mucha gente;
- mareos, etcétera.
Estos síntomas son generales y es muy
posible que en tu caso existan algunos de estos y varios otros, pero a fin de
cuentas, todos ellos te están avisando que existe algún problema
emocional que necesitas resolver dentro de ti, aunque en este momento
tal vez todavía no sea claro cuál es.
El alcohol y el tabaco han ayudado a
adormecer estos síntomas, de manera que el problema sigue ahí y frecuentemente
crece con el tiempo, pero las personas que beben o fuman por ansiedad pueden
seguir adelante con sus vidas… hasta cierto punto.
Estas sustancias, igual que muchos
fármacos, no son de ninguna manera una solución real, sino únicamente te quitan
las molestias sin preocuparse por ir a la raíz. Por esto es que resulta muy
importante saber pedir ayuda psicológica cuando ya no puedes tu sol@ con lo que
te está pasando.
Tratamiento humanista para curar la
ansiedad
Es muy común escuchar que no hay cura
a la ansiedad, pero en mi experiencia esta afirmación se debe a dos causas:
- Se busca eliminar la ansiedad (que es un
síntoma) en vez de ir a la causa real;
- Trata de atacarse con pensamientos e ideas lo
que se originó con hechos.
Las terapias donde sólo se habla y el
paciente “entiende” lo que le sucede, no funcionan porque el problema
real no es la falta de entendimiento, sino una o varias experiencias
que por su fuerza no pudieron ser asimiladas y que se encuentran al nivel de
las emociones y por lo mismo carecen de explicación lógica.
Lo primero que deseo compartir es que
la ansiedad sí puede Curarse, (así, con mayúsculas) pero NO existen
curas milagrosas ni remedios mágicos. Implica un trabajo profundo de
parte del paciente que no se conforma con vivir a medias, ni con “entender”
para acomodarse lo mejor posible a una situación indeseable.
Una vez dicho esto, el trabajo se
dirige al nivel corporal y emocional, que es donde se encuentra el origen del
problema del cual la ansiedad es sólo una “alarma” de nuestro propio organismo.
Cuando recibo pacientes para empezar
un tratamiento de psicoterapia humanista contra la ansiedad,
es común que lleguen preocupados porque su vida se ha vuelto gris en muchos
momentos y ya no saben qué hacer para cambiar esa situación, y frecuentemente
les afecta en su trabajo o en la relación con sus seres queridos.
Ya arriba decía que la ansiedad te
está avisando que algo no está bien en tu vida, así que lo primero que hacemos
es identificar las situaciones en las que sientes más ansiedad. ¿Acaso es
porque tienes un problema y no sabes si se va a resolver satisfactoriamente?
¿Sabes que necesitas cambiar algo importante en tu vida, pero te da miedo
hacerlo y entonces no te atreves? ¿Tal vez es un personaje conocido de tu vida,
pero no sabes cuándo ni cómo llegó?
Si la situación es más complicada,
porque involucra emociones fuertes de miedo, enojo, soledad, abandono, odio, y
otras, sería muy normal que tu sol@ no puedas lidiar con ello, y en estos casos
será necesario que acudas a buscar un psicólogo de tu confianza que pueda
ayudarte a encontrar las causas reales de tu problema y a solucionarlo, pero
cuidando que no sea una terapia únicamente racional ni verbal, sino que trabaje
con las emociones y sensaciones que se encuentran en tu cuerpo alrededor del
cuadro de ansiedad.
Mi consultorio se encuentra en la
Colonia Condesa, Ciudad de México D.F., y si buscas un tratamiento humanista
para curar la ansiedad, puedo acompañarte a resolver las situaciones difíciles
que estés atravesando. Si vives en otro estado de la República Mexicana, o en
otro país, te recomiendo que uses tu buscador favorito y busques ayuda
psicológica profesional en un lugar cercano.
Verás entonces que poco a poco
vuelves a ganar confianza en ti mism@ y puedes dejar la “seguridad” (y también
la pesadez) de tus viejas armaduras para enfrentar los problemas de la vida con
mayor confianza.
Por: Francisco Aguirre